Batería Riesgo Psicosocial es una herramienta que le permite evaluar el riesgo intralaboral, extralaboral y el estrés al que se enfrenta su colaborador. La aplicación de este instrumento y el análisis de los resultados que realice un psicólogo ocupacional permitirán determinar el programa a seguir en su compañía.
La Resolución 2646 de 2008 definió puntualmente los factores psicosociales que deben tenerse en cuenta para identificar, evaluar y prevenir el riesgo psicosocial en las organizaciones. A partir de esa categorización se han establecido un conjunto de variables que deben tomarse en consideración para este efecto y las cuales se estudian mediante la batería riesgo psicosocial.
Dentro de los factores de riesgo psicosocial a identificar y evaluar se incluyen aspectos intralaborales, extralaborales e individuales. Los primeros se refieren a las circunstancias en las cuales se desarrolla el trabajo. Los segundos, al estilo y calidad de vida de los trabajadores, fuera del ámbito laboral. Los aspectos individuales, por su parte, hacen alusión a las características psicosociales de cada trabajador en particular.
Cada uno de estos aspectos, a su vez, incluye una serie de variables o dimensiones que constituyen factores potenciales de riesgo psicosocial.
Si su empresa implementa la batería riesgo psicosocial previene los riesgos psicosociales, promueve entornos laborales saludables y obtiene los siguientes beneficios:
Reduce las posibilidades de accidentes y de ausencias por enfermedad, aumenta el rendimiento de los trabajadores y el trabajo de calidad.
Reduce el acoso laboral y aumenta el trabajo en equipo, mitiga el conflicto entre compañeros e incrementa el apoyo social.
Evita sanciones ante la supervisión de los organismos estatales y cumple con las normas de calidad.
Mejora la atención al trabajador y esto se ve reflejado en la imagen de su compañía hacia las familias y la comunidad donde vive el colaborador, además que genera un reconocimiento de la compañía como un buen lugar para trabajar.
Reduce las alteraciones fisiológicas (enfermedades cardiovasculares, alteraciones gastrointestinales, etc.), psicológicas (alteraciones de la conducta o de las capacidades cognitivas) o emocionales, y pueden darse directamente o estar mediatizados por una situación de estrés o por la interacción con otros factores.